El Sevilla FC y el Departamento de Historia del club han designado en el día de hoy a Pablo Blanco como XI Dorsal de Leyenda de la entidad. De este modo, se une a la lista de diez jugadores que han vestido la elástica nervionense en su historia como Juan Arza, José María Busto, Marcelo Campanal, Ignacio Achucarro, Antonio Valero, Paco Gallego, Enrique Lora, Curro Sanjosé, Antonio Álvarez y Enrique Montero.
Pablo Blanco aterrizó en la entidad de Nervión en la campaña 67/68 en categoría Juvenil procedente del Don Bosco. El jugador permaneció hasta 1984 como jugador, y después se incorporó de la secretaría técnica y director de los escalafones inferiores del Sevilla FC. Debutó con el primer equipo en la temporada 71/72, donde estuvo jugando 13 temporadas consecutivas y jugó tanto de defensa como de centrocampista. En sus últimos años, con equipo de Manolo Cardo, vivió uno de los mejores periodos futbolísticos del Sevilla FC en las cuatro últimas décadas del pasado siglo.
Blanco se retiró a los 33 años, y desde el club destacan su bravura y entrega en su fútbol, siendo exponente también de los valores de la casta y el coraje de la entidad sevillista. El jugador es el segundo jugador que más partidos oficiales ha disputado con el primer equipo, un total de 415, superado la pasada campaña por Jesús Navas, precisamente uno de sus muchos descubrimientos en su etapa como director de los escalafones inferiores.
Después de colgar las botas, Blanco ocupó el cargo de adjunto a la secretaria técnica, ayudando a Ángel Castillo y a Santos Bedoya. Después, con la presidencia de Luis Cuervas, comenzó a ser director de la cantera sevillista junto a Pepe Alfaro. A partir de los 90, Blanco ocupó este puesto en solitario ya que Alfaro comenzó a entrenar al Juvenil A.
