La piloto Laia Sanz fue una de las invitadas al MotoWeekend de Gijón y formó parte del coloquio en el que contestó a todas las preguntas.
Habló mucho del Dakar, y de lo que le gustaría que volviera a celebrarse en África: “Todos los que vemos el Dakar desde que somos pequeños nos gustaría que volviera ahí”
También explicó cuáles son las dificultades de correr un Dakar: “Es duro todo. Despertar sin dormir mucho es lo peor… También hay días con frío y otros con calor… Es un conjunto”
¿Por qué le absorbe una competición tan dura como esta? Lo tiene claro: “Porque somos un poco masocas” – bromea – “Es una carrera tan dura que tiene magia. El ambiente de compañerismo que no encuentras en otras categorías, también los paisajes te atrapan mucho. Te hace llegar al límite y tiene algo”
Laia se siente afortunada de que las lesiones no le hayan afectado en exceso y el poder haberse recuperado bien de todas ellas.
Y admitió que cuando vuelve de correr en un Dakar está: “por lo menos un mes sin tocar una moto”