Isabel Pantoja no solo debe hacer frente a las diferencias con su hijo Kiko Rivera, también, a la desorbitada cifra económica que debe a la Agencia Tributaria y a varios particulares.
Según el programa “Socialité”, personas como Tamara Gorro (que es amiga del propio Kiko Rivera) o Chelo García Cortés habrían prestado grandes cantidades de dinero a la tonadillera. Pero eso no es todo: también le debe dinero a Hacienda, a varias de sus fans y a personas que forman parte de su círculo. En total, Isabel Pantoja debería diez millones de euros.
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Isabel Pantoja está pasando su peor momento personal: Kiko Rivera ha roto completamente con su madre y mañana estará en el “Deluxe” especial domingo, tras una entrevista en la que vuelve a hablar mal de su progenitora y en la que asegura que su madre le debería tres millones de euros. La tonadillera está completamente endeudada, según el equipo de “Socialité”. Aunque llegase a vender la archiconocida finca heredada de Francisco Rivera “Paquirri”, “Cantora”, no sería capaz de hacer frente a la cantidad económica que debe.
Isabel Pantoja debería una cantidad cercana a los diez millones de euros entre lo que le pide Hacienda y lo que le ha dejado una serie de particulares cuando la tonadillera pasó por serios problemas legales. Según ha explicado Ángela Portero, la tonadillera se ve incapaz de hacer frente a la gran deuda que tiene y es consciente de que podría tener graves problemas con la justicia.
El programa ha explicado que son varios los seguidores y personas que formaron parte del círculo de la cantante los que prestaron dinero a la tonadillera. Por ejemplo, Chelo García-Cortés o Tamara Gorro le prestaron grandes cantidades de Isabel Pantoja y, todavía, no han visto un céntimo.
Y no hay que olvidarse de la deuda que arrastra por la reforma, en el año 2001, de Cantora Kopas. Isabel Pantoja ya fue condenada y debería la cantidad de 92 euros a la empresa.
A esto hay que unir la deuda con la Agencia Tributaria que, tras finalizar el pasado mes de octubre el plazo de pago del fraccionamiento, le solicita una cifra cercana a los 250 euros. Esto se une a recargos, costas e intereses. El año pasado, según el Registro Mercantil, la tonadillera debería dos millones y medio de euros y si no paga el Estado embargaría alguna de sus propiedades: la mitad de la finca Cantora, su ático en Fuengirola, la casa en el Rocío o sus distintas propiedades en la ciudad de Sevilla.