columnacero.com

Sin nada que perder

Imagen de la situación de pobreza que se vive en Yemen

Las últimas noticias sobre Yemen no son nada esperanzadoras. Millones de personas muriéndose de hambre y de enfermedades como el cólera.

No es una situación nueva, ni el único lugar africano atacado por la inanición y unas enfermedades centenarias, que mientras en otros lugares nos parecen imposibles de contraer, allí se convierten en el pan de cada día.

Y lo peor de todo, es que esas personas que viven por debajo del umbral de la pobreza, sólo les queda luchar para sobrevivir. Y eso la OMS (Organización Mundial de la Salud), lo denuncia diariamente. Esta misma semana, se ha producido el último brote de cólera, en Yemen, que ha matado a miles de personas. La ayuda humanitaria es poca. Hacen falta más recursos, más medios que muchas veces, ni nosotros, los países más desarrollados, tenemos a nuestra disposición. Un claro ejemplo son las vacunas. Muchos niños africanos no pueden vacunarse por no disponer de ello. ¿ Pero qué podemos hacer?. Es difícil combatir contra el mal, pero si además ataca a personas tan vulnerables y en lugares tan apartados de la mano de Dios, pues todo se complica.

Y no sólo las enfermedades, es que tampoco tienen recursos alimentarios. Están totalmente desnutridos. Tienen una falta de alimentación, que yo creo, para cuando les llega la ayuda, ya es demasiado tarde.

Es una situación triste, que nos la recuerdan cada cierto tiempo. Pero yo pienso, que cuando la OMS hace un llamamiento a nivel internacional, es porque algo muy grave está ocurriendo.

No hay que olvidarse de estos lugares, nos necesitan y donde hay futuro hay esperanza. Aunque en principio parece que no tienen nada que perder, son vidas humanas que se apagan cada día. Y merece la pena luchar por esas vidas, con un poco de esfuerzo diario. Las ONGs lo hacen. las organizaciones internacionales, también y nosotros, la sociedad, solidarizándonos con esas personas y transmitiéndoles nuestra fuerza, también podemos ayudarles.

Con un poco de esfuerzo diario podemos conseguir devolver la normalidad a Yemen y a otros lugares que vivan una situación parecida o igual.

Exit mobile version