El presidente Pedro Sánchez ha llamado a la calma. A pesar de que la ministra de Educación y portavoz del Gobierno, Isabel Celaá, anunciara que el Gobierno podría provocar un adelanto electoral, Sánchez ha pedido a sus socios parlamentarios, como Unidos Podemos, PNV o ERC a que le apoyen y aúnen fuerzas para agotar la legislatura hasta 2020.
En el futuro más próximo del Gobierno están dos objetivos que va a tener difícil superar, pero que es posible que reúna gran parte de los apoyos: la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado 2019 y, mucho más tempranamente, el objetivo de déficit y deuda pública para el próximo año. Por el momento, el PSOE no cuenta con los apoyos suficientes para sacar adelante dicho plan económico.
El PP y PDeCAT anunciaron que llevarían a cabo una oposición férrea al Gobierno de Pedro Sánchez. Por eso el presidente necesita de los apoyos parlamentarios de gran parte de los partidos del Congreso para llevar a cabo reformas y proposiciones de ley. Con 85 diputados necesita pactar y llegar a puntos en común, sobre todo, con Unidos Podemos, que suman un total de 130 escaños.