La falta lanzada por Leo Messi en el encuentro del pasado domingo que supuso la victoria del Barça ante el Atlético y que deja a los de Simeone a unos quiméricos ocho puntos de diferencia sobre su rival, ha sido de lo más comentado en los últimos días. Primero, en el programa de televisión El Chiringuito elaboraron una simulación 3D del gol que revela que la barrera estaba 2,15 metros más atrás de lo que debía. La distancia mínima reglamentaria es de 9,15 metros, pero el árbitro Jesús Gil Manzano la marcó con el spray en 11,3 metros. Una diferencia que permitió que la pelota tomase la altura óptima para pasar por encima de los jugadores rojiblancos. Quizá, si la barrera hubiese estado colocada en su lugar, ese disparo se hubiera estrellado en Diego Costa. Un hecho que levantó la polémica.
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Hoy, además, el programa El Día Después de Movistar Plus ha revelado a través de un vídeo como Piqué, Rakitic y Busquets se colocaron en la barrera con el fin de “molestar” y tapar la visión de Jan Oblak.
El meta esloveno intentaba atisbar lo que sucedía detrás de la poblada barrera pero la picardía de los culés para ayudar a Messi con esa acción terminó surtiendo efecto. “No ve, no ve, no ve, no ve”, decía el central provocando la reacción de Busquets, que se giraba para verificar la situación del portero. Instantes después, el balón entraba por la escuadra y Oblak, a pesar de rozarlo con los dedos, no llegó a interceptarlo.