Si alguien pensaba que Red Bull emplearía los colores del Disruption Bull utilizado durante la pretemporada, ha debido de llevarse una mala noticia. El equipo de Milton Keynes no hará ninguna revolución estética y el RB14 será prácticamente idéntico a sus predecesores de las tres últimas temporadas, con la clásica decoración en azul oscuro, amarillo y rojo. Aquella decoración en negro y azul oscuro con detalles de camuflaje óptico tan sólo pervivirá en fotos y vídeos de archivo, ya que como era de esperar su propósito vital no era otro que el de ocultar soluciones aerodinámicas a la competencia.
La principal novedad estética es, cómo no, el halo, omnipresente en todas las presentaciones de los equipos esta temporada. Precisamente debajo de él se sitúa el vinilo de Aston Martin, uno de los principales patrocinadores del equipo. Mientras que TAG Heuer, el otro gran mecenas de los de Milton Keynes tiene un lugar reservado debajo de la cubierta del motor.
Red Bull afronta la temporada con optimismo, tras haber sido el tercer equipo la temporada pasada, tras Mercedes y Ferrari, las dos grandes escuadras a batir. Sin embargo no pudieron hacer nada contra ellos, logrando sólo tres victorias, las únicas que no fueron a parar ni a Vettel ni ambos pilotos de Mercedes.