Si hay alguien que conoce bien la Fórmula 1 y la resistencia, ese es Mark Webber. El australiano, compañero de Vettel durante la época de su dictadura en Red Bull, dejó la Fórmula 1 para embarcarse en el Campeonato del Mundo de Resistencia con Porsche. Una aventura que se saldó con un título mundial en el Campeonato del Mundo de la disciplina en 2015 y un subcampeonato en la edición de Le Mans de ese mismo año. El australiano se ha pronunciado sobre la decisión del español de correr ambos campeonatos a la vez, y si bien le desea suerte, teme que acabe quemando al piloto y por ende, no esté a la altura de su potencial.
Alonso tendrá que enfrentarse a un calendario de 25 pruebas entre las 21 de Fórmula 1 y las 4 del WEC que se celebrarán en 2018 (ya que a partir de este año el WEC durará desde primavera de 2018 a la de 2019). “Definitivamente es un auténtico piloto, quiere correr a la mínima ocasión posible. Eso era algo que no se podía hacer hace tres o cuatro años” [en referencia a que antes coincidían muchas más pruebas de ambos campeonatos]
Webber habló también de los renovados aires en McLaren, ahora que con un motor Renault el equipo británico tiene unas expectativas más elevadas que en la fallida aventura con Honda: “Creo que la idea de correr en la Indy el año pasado fue genial. Obviamente McLaren también tuvo un año espantoso, espero que sean un poco más competitivos este año. Sólo espero que las distracciones que pueden suponer estar lo máximo posible en ambas categorías, cuando existe la posibilidad de conseguir un buen resultado en Fórmula 1, no se pierda por abarcar más de lo que puede”.
Webber destacó además que ha tenido unas circunstancias más favorables para poder compaginar ambas categorías: “Ahora puede, con menos tests en F1 y sin en una etapa muy competitiva, si estuviera peleando por un campeonato del mundo, no estaría realizando nada de esto. Tampoco invierte mucho tiempo en el simulador en McLaren, es un piloto de la vieja escuela y es lo que más admiro de él”.
Por su parte, Fernando habló por primera vez de sus impresiones al montar en el Toyota TS050, tras un test de tres días en el Motorland de Aragón, justo después de las 24 horas de Daytona. “El coche es simplemente fascinante, esta máquina es algo especial. La tracción a las cuatro ruedas junto con el impulso que te da el sistema híbrido hace que acelere como un cohete. Llegas a las curvas y sientes cómo te pegas al asiento y cómo se te abren los ojos. Cualquier piloto debería sentir esto al menos una vez. No puedo esperar hasta junio, pero antes del gran evento necesito hacer algunos tests, porque tenemos que prepararnos en condiciones para Le Mans”.