La saltadora de altura Ruth Beitia, medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Río 2016, ha anunciado esta mañana su retirada de la alta competición. La atleta cántabra ha hecho este anuncio en una rueda de prensa que ha tenido lugar en el Palacio de Deportes de su ciudad natal, Santander, acompañada de su entrenador, Ramón Torralbo, y sin haber podido contener las lágrimas.
Beitia ha afirmado que su decisión se debe a que ha pasado “seis meses muy duros” en los que las lesiones le han causado “mucho dolor” debido, en parte, a la tendinosis del supraespinoso por la que está afectada. A pesar de ello, se siente “feliz” por lo que le ha dado el deporte que, en su opinión, ha sido “generoso” con ella y que le ha permitido recoger en los últimos años “los frutos sembrados durante tantos años de entrenamiento”.
Antes de dar la noticia, Ruth Beitia ha entregado la medalla de oro que consiguió en los Juegos Olímpicos de Río al Museo del Deporte de Cantabria, un metal que fue “un sueño hecho realidad” para ella y ha asegurado que seguirá vinculada al atletismo, tanto desde la Federación Española como desde el Comité Olímpico, pero no como entrenadora.
Beitia ha hecho balance de su carrera deportiva: “Han sido muchos años de trayectoria deportiva y hemos puesto el cuerpo al cien por cien en muchas situaciones y al límite en otras”. La saltadora ha concluido que “todos esos valores y todo lo que nos ha enseñado y ocurrido con Ramón me toca llevarlos a otro aspecto de la vida”.
Ramón Torralbo ha tomado la palabra después de que lo hiciera su pupila para reconocer lo mucho que siente su adiós al afirmar que “se despide la mejor atleta que ha habido en España”. Con todo ello, Ruth Beitia se despide de la competición con 38 años de edad y con un palmarés envidiable en el que figuran 15 medallas, entre las que destacan tres campeonatos de Europa y el mencionado oro olímpico en Río de Janeiro.