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Golpe de autoridad del Barça

Los dos llegaban con confianza, en sus últimos partidos sumaron de tres y en todo momento fueron conscientes de la trascendencia de este choque para la consecución de sus objetivos.

El Inter buscaba la victoria para afianzar la tercera posición, Osasuna Magna y Palma lo siguen de cerca en la tabla y una derrota hoy podría hundirlos hasta la quinta posición dependiendo del resultado de sus perseguidores el fin de semana. El Barcelona por su parte, en su igualadísima lucha con el Pozo Murcia, se marcó como propósito asaltar uno de los bastiones más importantes de esta liga para afianzar el liderato.  

El partido comenzaba tranquilo, se palpaba el respeto por parte de los dos escuadrones. Los locales, como se ha ido viendo durante toda esta temporada, acusaban fallos de concentración que le estuvieron a punto de costar el primer gol culé. El Barcelona ejercía una presión bien organizada, sin correr excesivos riesgos atrás, esperando el fallo de sus rivales.

La idea de Jesús Velasco era clara, quería plantear un esquema defensivo, siempre con tres jugadores de ese perfil sobre la pista. La entrada de Bebe, dio un leve impulso al juego de Inter, que no empezó a crear peligro serio hasta encajar el primer gol.

El Barcelona estaba más cómodo que Inter pero tampoco conseguía encontrar su sitio. Ortiz cumplió con su tarea de forma sobresaliente, Ferrao no fue visto en la primera mitad.

El gol de los visitantes llegaría fruto de un destello de Leo Santana, que con un recorte de manual silenciaba el pabellón interista.

La segunda parte pareció otro partido completamente distinto. Inter salió enchufado desde la primera jugada y acorraló al Barça en su campo. Ortiz y Gadeia lo intentaban con disparos potentes desde fuera del área que Juanjo salvaba con bastantes problemas.

Cuando ya se olía el empate, llegó el segundo de los de Andreu Plaza, que supieron defenderse como leones, esperando su momento para saltar a la contra y asestar un golpe cuasi definitivo.

Inter parecía haberse apago, cuando Borja sacó a relucir su mágica zurda para anotar el tanto que volvía a despertar el fervor en la grada.

 Con el portero jugador Inter empezó a generar mucho más, olían la sangre, pero les faltaba temple para gestionar el final de partido, cayeron continuamente en la trampa de la precipitación.

Así acabó un partido donde el Barcelona fue mejor equipo, demostró que tiene categoría para conservar el liderazgo y que es el más serio aspirante al título liguero.

El Inter tuvo buenos momentos de fútbol, les faltó continuidad, y electricidad. Acusaron sobretodo fallos de concentración y falta de movilidad en ataque, estuvieron muy estáticos.

Ambos equipos ya miran hacia el campeonato europeo, donde tienen depositadas enormes esperanzas de levantar el título. 

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