El Real Madrid avanzó a las semifinales de la Champions tras un partido agónico frente a la Juventus de Turín. Los de Concha Espina esperaban un encuentro tranquilo tras el ventajoso 0-3 del partido de ida, pero varios fallos defensivos y un error individual de Keylor Navas pusieron contra las cuerdas a los vigentes campeones, a pesar de ello, un gol del penalti de Cristiano Ronaldo evitó la prórroga y decantó la balanza.
En el minuto dos, Sami Khedira puso un centro medido al corazón del área para que Mandzukic marcase el primer gol del partido. El panorama era inmejorable para los de Allegri, el Madrid, por su parte, tardó 10 minutos en reaccionar y, cuando mejor estaban los de Zidane, Mario Mandzukic golpeó de nuevo tras un nuevo centro esta vez tras un envío perfecto de Douglas Costa.
El primer tiempo terminó con una sensación de nerviosismo en el Santiago Bernabéu. El juego del equipo no era ni mucho menos malo, y las esperanzas de remontada visitante eran cada vez menores. Pero, en el minuto 61, Keylor Navas cometió un grave fallo al atajar el esférico el cuál permitió a Matuidi poner el 0-3 en el marcador e igualar la eliminatoria.
Un nuevo partido comenzaba entonces, Real Madrid y Juventus tenían 30 minutos para disputarse en igualdad de condiciones un puesto en las semifinales de la Champions League. Lo cierto es que no hubo ninguna ocasión clara que decantase la balanza hasta el minuto noventa.
Nada más darse a conocer los 180 segundos de prolongación, Lucas Vázquez cayó dentro del área tras ser derribado por Benatia. El colegiado del encuentro, Michael Oliver, señaló penalti y comenzó una tangana que terminó con Buffon expulsado y cinco minutos de juego parado.
Ya con aparente normalidad en el césped, Cristiano Ronaldo convirtió la pena máxima y desató la locura en el Bernabéu que, dos o tres jugadas después, celebró el pase de su equipo a semifinales, ronda que alcanzan los merengues por octavo año consecutivo.