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El bizcocho de avellana, una delicia para la mesa de Navidad

El bizcocho de avellanas, perfecto para los festejos de la Navidad.

Con la llegada de la Navidad muchos chefs y amas de casa comienzan a revisar las recetas de repostería decembrina que siempre colman de dulces sabores las mesas durante las fiestas. Entre estas miles de delicias se encuentra el bizcocho de avellana, una fabulosa opción para deleitar a todos en la Nochebuena. Muy fácil de hacer en casa, es ideal como acompañante de un buen café o té y luce espectacular bañado de azúcar glas y relleno de almendras. Un suculento postre horneado ideal para una mesa de dulces, puedes decorarlo con almendras peladas y guindas de cereza. Aquí encontrarás esta rica recetas para que deleites a tus familiares y amigos durante las fiestas de la Navidad y Fin de Año.

¿Cómo cocinar el bizcocho de avellana?

Para la masa necesitarás 230 g de harina, 150 g de leche, ½ dado de levadura, 45 g de azúcar, 65 g de mantequilla derretida y ½ cucharadita de sal. Para el relleno requerirás de 50 g de sultanas, 50 g de mantequilla derrerita, 50 g de masa cruda de mazapán, 100 g de avellana molida, 50 g de pan rallado, 50 g de harina de trigo, 1 huevo, 1 cucharada de sémola, 150 g de azúcar y 2 cucharadas de limón confitado. La decoración se realiza con 50 g de mantequilla, 80 g de azúcar y 50 g de azúcar glass.

Para comenzar con la preparación de este rico postre deberás tamizar la harina en un cuenco grande y hacer un hueco en el centro. Templar la leche, desmenuzar la levadura en el hueco y mezclarla revolviendo con la leche, una pizca de azúcar y un poco de harina por los bordes. Tapar la masa madre y dejarla en un lugar caliente hasta que aumente de volumen.

Incorporar a la masa madre el azúcar restante, la mantequilla derretida y la sal. Mezclar todo con un batidor manual, hasta que la masa suelte burbujas y se desprenda de las paredes. Taparla y dejarla en reposo en un lugar caliente durante 20 minutos.

Para el relleno, lavar a fondo las sultanas con agua caliente y secarlas con papel de cocina. Fundir la mantequilla. Mezclar y revolver en un cuenco la masa cruda de mazapán, la avellana molida, el pan rallado, la harina, el huevo, la sémola, el azúcar, el limón confitado y media taza de agua. Incorporar la mantequilla derretida. Engrasar un molde rectangular de 25 cm de longitud y calentar el horno a 180 °C.

Estirar la masa de levadura sobre la superficie de trabajo enharinada, formando un cuadrado de 25 x 25 cm. Extender el relleno de avellana y esparcir por encima las sultanas. Enrollar la capa de masa uniformemente, de derecha a izquierda. Poner el bizcocho en el molde.

Hornear a 160° C durante 50 minutos. Dejar que el bizcocho de avellanas se enfríe en la bandeja. Volcar en otra bandeja el bizcocho ya frío. A fuego lento, derretir la mantequilla y untar el bizcocho de avellanas. Por último, espolvorearlo con azúcar y tamizar encima el azúcar glas.

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