Un loro gigante obligó a detener un partido de fútbol durante un cuarto de hora el partido que se disputaba entre el Santa Gertrudis yt el Sant Jordi, en la isla de Ibiza.
Según el presidente del seundo equipo, el árbitro interrumpió el encuentro porque el ave, de unos 80 centímetros y con garras afiladas, llevaba sobrevolando la zona desde antes del partido y los jugadores se sentían intimidados. Según él mismo, uno de los jugadores tenía verdadero pavor al animal Por lo tanto, procedió a “la intervención en varios momentos del partido de un loro de gran tamaño creando peligrosidad en uno de los ataques”.
Según el Seprona, el loro lleva varios días en libertad tras escapar de la jaula de su dueña y le están intentando capturara para que no suponga ningún peligro a los habitantes de la isla. “Lo vamos a hacer la mascota oficial del club porque cuando se suspendió el partido íbamos perdiendo 0-3”, bromeaba el presidente del club.