La Policía Nacional ha detenido a un hombre por simular un delito para encubrir un robo que había cometido. El detenido es un camarero de un bar de Oviedo, que se llevó la recaudación del local para jugársela en el casino.
El arrestado, de 44 años y nacionalidad filipina, gastó todo su dinero jugando a las tragaperras. Al verse sin nada, se aprovechó de que tenía las llaves del bar donde trabajaba y entró para llevarse la recaudación, que terminó gastándose en las tragaperras y el casino.
Para evitar ser descubierto, el hombre decidió fingir un robo al día siguiente. Para ello, se desgarró la ropa y se clavó un cuchillo en el abdomen, provocándose heridas de tal gravedad que tuvo que ser ingresado.
Fue en el hospital donde la Policía empezó a sospechar que las cosas no habían ocurrido como el hombre contaba. Varias contradicciones en la versión del herido dieron la voz de alarma, por lo que los agentes pidieron que se hiciese un análisis forense para determinar si la puñalada era autoinfringida.
Una vez recibió el alta, el camarero fue citado por la Policía para seguir con la investigación. Ya en dependencias policiales, el hombre terminó reconociendo que se había inventado el robo para no dar cuentas de su propio delito.