“¿Qué nos está pasando a la sociedad para que se produzca tanta crueldad?”. Esa es la pregunta que se hace la madre de Gema B.D., una chica de 23 años con síndrome de Down que fue agredida en el metro de Barcelona. El agresor ha sido identificado como alguien de mediana edad que, sobre las 13.50, trató de apearse junto con la víctima. Iba detrás de ella y, para adelantarla, le propinó un codazo en el hombro para, posteriormente, colocarse delante de ella y darle un puñetazo en la cara que le rompió las gafas y lesionó la nariz.
La familia de Gema, que prefiere ocultar sus apellidos, ha denunciado los hechos a los Mossos d’Esquadra y, junto con el parte de lesiones, ha reclamado el video de las cámaras de seguridad.
Gema se quedó paralizada ya que tiene tan sólo el 3 por ciento de visión y lleva audífono, por lo que tuvo que pedir auxilio. El agresor salió corriendo. “Se pasó dos horas de reloj llorando. Era un mar de lágrimas. Tardó en encontrar consuelo” explica su madre.