El pasado miércoles efectivos de la Policía Nacional hallaron en el entorno del recinto de la Universidad Pablo de Olavide (UPO) de Sevilla un cadáver. Hoy se ha confirmado que se trata de Jesús Bueno Fernández, desaparecido desde el 15 de mayo.
Según informa Europa Press, se realizaron todas las pruebas pertinentes, autopsia, de ADN y dactilares para identificarle; pues su cuerpo estaba en una visible fase de descomposición. El cadáver fue hallado por unos agentes de la unidad de caballería de la Policía Nacional que llevaban a cabo una batida por las inmediaciones del recinto de la UPO, en el marco de las labores de búsqueda promovidas por el Grupo de Homicidios.
Su vehículo, un modelo Mitsubishi Colt de color negro, se encontró días antes junto a la Universidad Pablo de Olavide. Los agentes descubrieron el cuerpo sin vida en una zona encuadrada entre el recinto académico y el canal del Bajo Guadalquivir.
El Grupo de Homicidios de la Policía Nacional mantiene abierta la investigación para esclarecer las causas de la muerte del hombre, sin descartar ninguna hipótesis.
La familia de Bueno ha difundido un comunicado a través de las redes sociales, en el que ha manifestado su agradecimiento "sincero" a la Policía Nacional por su "intensa y rigurosa" labor desarrollada para localizar a su ser querido, así como la labor que se está haciendo para esclarecer las circunstancias exactas del fallecimiento, y para la que pide el máximo respeto.
Asimismo, agradece "de corazón" a los medios de comunicación "la prudencia y discreción" que han mostrado durante la búsqueda, "no difundiendo rumores ni especulaciones". Añade: "Tenemos plena confianza en que dicha discreción se mantendrá ahora, en que encaramos una durísima situación de pérdida".
Para concluir, señala que desean encarar "estos duros momentos de dolor en la más estricta intimidad, sabiendo que cuentan con el exquisito respeto del que todos nos habéis rodeado desde el principio".