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La mafia hispano-marroquí cobra 2 euros por meter a los inmigrantes en una patera

Registros de los pisos patera.

La historia de la inmigración en pateras y balsas suma un capítulo más. Ahora han dado con una célula de la mafia hispano-marroquí, dedicada a colar inmigrantes por 2 euros, y otros 300 por empadronarles en los pisos patera que tienen en localidades de las costas españolas; en uno de ellos había 16 empadronados, sin despertar las sospechas del ayuntamiento.

Mayores y menores

En la redada se ha dado con 27 inmigrantes distribuidos en los inmuebles alquilados, entre los que hay varios menores que han viajado solos. Todos trabajaban en los invernaderos a modo de esclavos: sin contrato, con escaso salario, jornadas maratonianas y el poco dinero que les daban era para los mafiosos que cobran estancia y manutención a precio de un 5 estrellas.

Tratantes y empresarios

Esta célula, formada por los 15 ahora detenidos, entre los que hay varios dueños de invernaderos, contaba con 7 viviendas en las provincias de Granada, Madrid, Murcia y Albacete, donde se ha intervenido documentación, pasaportes, certificados de empadronamiento preparados para su venta y dispositivos informáticos.

Desde enero

Desde que comenzó la investigación, en enero, cuando llegan varias pateras a las costas de Barbate (Cádiz), con tripulantes que han logrado alcanzar tierra o porque el servicio de Vigilancia Marítima de la Guardia Civil los ha avistado, y las patrulleras de salvamento han rescatado y puesto en tierra firme.

De la patera al bosque

Esta llegada paulatina y progresiva de naves despierta las sospechas, porque a los pasajeros, tras ser atendidos, los recoge una persona que les da instrucciones, para que se escondan en los bosques cercanos, durante el tiempo en que les falsifican la documentación que tienen que presentan en las administraciones.

2 pavos

En estas llegadas los agentes identifican a uno de los encargados de recoger a los inmigrantes a su llegada a la costa y, a partir de ahí, se sigue el hilo de la célula, estructurada entre Marruecos y España. En tierras marroquís los tratantes invitan a sus compatriotas a cruzar la frontera de Europa, por unos 2 euros. Una vez cobrados y reunido el grupo de entre 20 y 40, dependiendo del tipo de embarcación y de las previsiones de poder colarles.

Barcos nodriza

Se les convoca de noche en las playas y emprenden la travesía, de unas 14 horas. Hay datos que confirman que este largo trayecto tiene dos fases. En principio navegan a bordo de un barco nodriza, que al llegar a aguas españolas mete a los inmigrantes en las pateras, con las instrucciones de que esperen a ser avistados por sus rescatadores, y provistos de tarjetas de móviles con el número de contacto de su recogedor en España, en este caso, las playas gaditanas próximas a Barbate o Bolonia.

350 más la droga

Y luego, la secuencia ya descrita: ocultarse y a los pisos de las localidades granadinas de Motril, La Rábita y alrededores. Así, hasta 150 inmigrantes, que le han generado a la mafia más de 350 euros en menos de 4 meses, más los beneficios del tráfico de hachís y coca.

Mulas baratas

Porque otra de las peculiaridades de los tratantes es que invitan a que los inmigrantes porten la droga hasta su destino, lo que supone una mula barata para unos, y una rebaja del pasaje para otros. Los agentes han incautado 140 kilos de hachís en una de las pateras.

Esta redada es del Servicio de Información de la Guardia Civil, desarrollada bajo la supervisión y dirección del Juzgado mixto nº 3 de Motril (Granada).

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