Belén Esteban relató ayer en Sálvame un tenso reencuentro vivido en la calle con Fidel Albiac, cuando iba de camino a hacer unas gestiones bancarias con su marido, Miguel Marcos, el marido de Rocío Carrasco no tuvo una reacción con la princesa del pueblo precisamente amistosa y eso que llevaban mucho tiempo sin verse.
Belén fue a San Sebastián de los Reyes a realizar unas gestiones con su marido y que tanto ella como Fidel se vieron perfectamente pero que a la tertuliana no le salió saludarle ni a él tampoco, el marido de Rocío Carrasco iba hablando por el móvil con los cascos puestos.
Aprovechó para pensar sobre cómo podía haber afectado a Rocío Carrasco la actitud en el concurso de su hija Belén Esteban. Comentó que había visto a una joven y que él no había tenido ni una mala palabra hacia su madre ni había consentido que nadie la tuviera, que podía haber hablado allí de Fidel y no la he hecho. Opina que Rocío Flores le ha dado una bofetada con la mano abierta tanto a Rocío Carrasco como a su pareja, ya que ellos pensaban que iba a hablar y finalmente no lo ha hecho.
Finalmente opina qué Rocío Carrasco llamará a Rocío Flores tarde o temprano y que su hija dejará todas las cosas que tenga para ir a verla.