Belén Esteban no atraviesa su mejor momento. A pesar haber estado viviendo un gran día de la mano del cumpleaños de su madre, parece que no hay manera de que la colaboradora de Sálvame consiga la tan ansiada estabilidad emocional que tantos problemas le está trayendo.
Así se pudo ver en pleno directo en Sálvame cuando esta, casi sin tiempo a que se le borrara la sonrisa al hablar del cumpleaños de su madre, torció el morro y perdió las formas de mala manera en pleno directo. La razón fue, cuanto menos surrealista.
Levantada, mirando a cámara y con la mirada ida, la de San Blas espetaba lo siguiente: "Me han llamado 18 veces esta tarde desde un número anónimo". Una clara revelación de acoso que dejaba petrificados a los presentes pensando quién podría ser que era y que finalmente ha asegurado se debía a una llamada comercial infinita. "¡Es que es toda la tarde! ¡Me lleva vibrando toda la tarde el móvil! ¡Qué pesados!", agregaba.
A punto de echar espuma por la boca, esta, a grito pelado, finalizaba: "No me llames más que no te voy a coger el teléfono No cojo números privados. ¡Ya está bien!". Otra escena surrealista para los anales de Telecinco.