La vida privada de los famosos, por mucho que creamos sabemos de ellos, es tan desconocida como sorprendente. Y si no, que se lo digan a los fans de Jorge Javier Vázquez, quienes deben estar alucinando con los cinco secretos inconfesable de la vida del catalán. Vamos a repasarlos.
El primero de ellos hace referencia a su complicada infancia. Esta, a diferencia de lo que ocurre con la mayor parte de los chicos de su edad, la pasó solo leyendo y escuchando música. Sin más amigos de verdad que estos.
El segundo hace referencia a su adolescencia. Y es que, aunque ahora parece imposible de creer, en esa etapa de su vida estuvo muy cerca de convertirse en un ferviente en miembro del Opus Dei. El tiempo que pasó estudiando en centros dirigidos por ellos y su amistad con varios de ellos estuvieron muy cerca de conseguir lo que su padre, finalmente, evitó: Que le captaran.
El tercero es quizás el más oscuro. Este tiene que ver, como publicó Vanitatis, con su gusto por inhalar suero con una mascarilla. Algo que le ayudaría, según él, a cuidar a sus maltrechas cuerdas vocales.
El cuarto es el que le une a Ana Rosa. De ella él recuerda que es la que menos le costaba pagar bien pagado y en tiempo y forma. Algo que le ha traído problemas con su archienemiga María Teresa Campos.
El quinto y último, y también de lo más oscuro, es el que le define como hipermaniático. Según cuenta la citada publicación J. J tiene que pasar la lengua por los cubiertos cuando come fuera, evitar tocar los pomos de los baños públicos o tener que bañarse en perfume antes de salir a hacer un programa. Muy oscuro.