México vuelve a ser el escenario de un nuevo terremoto, esta vez de 7,2 en la escala de Richter. El epicentro del seísmo tenía lugar en el estado de Oaxaca, al sur del país y a unos 600 kilómetros de la capital mexicana.
Preliminar: SISMO Magnitud 7 Loc 8 km al NORESTE de PINOTEPA NACIONAL, OAX 16/02/18 17:39:39 Lat 16.41 Lon -98.03 Pf 10 km pic.twitter.com/2lklB4blFC
— Sismologico Nacional (@SismologicoMX) 16 de febrero de 2018
El gobernador del territorio, Alejandro Murat, afirmaba que “no hay constancia de pérdida de vidas humanas debido al seísmo, pero sí sabemos que hay daños materiales especialmente en la zona de la costa”. Él era uno de los supervivientes del suceso, pues conseguía salir ileso de un accidente del helicóptero, junto al ministro de Gobernación, Alfonso Navarrete, cuando se trasladaban al lugar de los hechos. El piloto perdió el control del vehículo cuando estaban descendiendo. Sin embargo, en el incidente sí que morían dos ciudadanos.
El Secretario @navarreteprida, el Gobernador @alejandromurat y la tripulación se encuentran bien. Lamentablemente, varias personas en tierra perdieron la vida y otras resultaron heridas. Mis condolencias para sus familiares y mis deseos de pronta recuperación a los lesionados.
— Enrique Peña Nieto (@EPN) 17 de febrero de 2018
Después de el primer terremoto, el más fuerte, hubo hasta 200 réplicas más. Momentos antes de que se produjera el seísmo, las alertas sonaron en las ciudades, y la gente se echó a las calles. “Qué susto he pasado, pensé que iba a ser como el de hace unos meses pero ha sido menos tiempo”, aseguraba una vecina, mientras que otra confesaba que “se bloqueó”, ante el pánico que inundó su cuerpo.
Protección Civil ha activado la alerta ante la posibilidad de que se produzca un tsunami en la costa del océano Pacífico, aunque sea “improbable”. En Ciudad de México no ha habido afectados graves, ya que solo “estamos tratando crisis nerviosas y algunos inmuebles”.
Solo cinco meses.
El pasado 19 de septiembre, México sufría uno de los terremotos más fuertes de su historia, con más de 300 muertos, miles de personas atrapadas bajo los escombros y cientos de derrumbes de edificios.