El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y el papa Francisco entablaron conversaciones sobre el cambio climático, la pobreza y la pandemia del coronavirus, durante una hora y cuarto en el Vaticano el viernes.
Los dos líderes, que se abrazaron con cariño, se sentaron uno frente al otro en un escritorio de la biblioteca papal, acompañados de un traductor. Los dos oraron juntos y discutieron el imperativo moral de que los líderes mundiales aborden el cambio climático; dijo Biden.
La reunión privada se prolongó, mientras los dos dialogaban sobre temas personales y mencionaron la pérdida de Biden de su hijo adulto, Beau. Luego, Biden y el Papa intercambiaron obsequios y celebraron una reunión más amplia, que incluyó a la primera dama Jill Biden y altos funcionarios.
La prolongada sesión, que Biden calificó de "maravillosa", retrasó más de una hora al presidente de los Estados Unidos en las reuniones oficiales con los líderes gubernamentales. Cientos de personas se alinearon en las calles de Roma para ver la caravana del presidente de los Estados Unidos mientras pasaba, y muchos tomaron fotos.
Joe Biden participará en la reunión del G20
Este es el primer viaje de Biden a Europa, desde que asumió la presidencia de EEUU en enero. El mandatario participará en una cumbre de los líderes del Grupo de los 20 (G20), las mayores economías del mundo, en Roma el 31 de octubre y en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP26) en Glasgow, Escocia, el 1 y 2 de noviembre.
El viernes por la tarde, Biden se reunió con el primer ministro italiano Mario Draghi y el presidente Sergio Mattarella, así como con el presidente francés Emmanuel Macron.
Se espera que el presidente de Estados Unidos se reúna al margen del G20 con el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, dijo el jueves a la prensa el asesor de seguridad nacional, Jake Sullivan. Es probable que los dos hablen sobre la exclusión de Turquía, miembro de la OTAN, del programa de aviones de combate F-35 de Estados Unidos.
La reunión de Biden con el Papa se produce cuando enfrenta críticas en los Estados Unidos por parte de obispos católicos sobre el tema del derecho al aborto. Actualmente, se está gestando una batalla política importante en los Estados Unidos, mientras la Corte Suprema se prepara para dictaminar si los estados pueden prohibir los procedimientos de aborto.
Los obispos estadounidenses han estado debatiendo si se debe permitir que Biden continúe recibiendo la Sagrada Comunión, un rito cristiano de adoración que implica tomar pan y vino en memoria de Cristo.
Como todo un devoto católico romano, Biden asiste a misas semanales con regularidad y mantiene una foto del Papa detrás de su escritorio en la Oficina Oval. El mandatario ha dicho que se opone personalmente al aborto, pero como líder electo no puede imponer sus puntos de vista.
Biden, de 78 años, dijo que el Papa Francisco, de 84, le aconsejó que siguiera tomando la Sagrada Comunión. El mandatario afirmó que los dos no discutieron el tema del aborto directamente, pero que "solo hablamos sobre el hecho de que él estaba feliz de que yo fuera un buen católico y … siguiera recibiendo la comunión".
Biden es el segundo católico en ser elegido presidente de Estados Unidos. El primero fue el presidente John F Kennedy en 1960.
"En su audiencia con el Papa Francisco hoy, el presidente Biden agradeció a Su Santidad por su defensa de los pobres del mundo y los que sufren hambre, conflictos y persecución"; dijo la Casa Blanca en un comunicado.