Según informa Jaled Muhahid, portavoz del Ministerio de Sanidad de Egipto, al menos 28 personas han sido asesinadas y otras 24 heridas en un ataque contra un grupo de cristiano coptos que iban en autobús en un pueblo llamado Al Adua, en la provincia de Menia (unos 350 kilómetros al sur de El Cairo).
El autobús ha sido atacado por un grupo de hombres armados y, según las primeras informaciones, se dirigían hacia el monasterio de San Samuel. Según afirman en Nile News, una televisión egipcia, 12 personas han recibido el alta después de recibir tratamiento y recuperarse en el hospital. Mientras otras 11 personas fueron llevadas al hospital Nasser en El Cairo con diferentes dolencias como fracturas en el fémur, pie, pelvis, hombro, mano, una herida de bala en el muslo y otra en el pecho.
Tercer atentado en menos de dos meses
Hace alrededor de un mes y medio se produjo un doble atentado contra iglesias al norte del país, dejando más de 40 muertos y siendo reclamado por el ISIS (Estado Islámico). Poco después el Papa Francisco visitó El Cairo y abogó por el diálogo con Al Azhar, llamando a resistir a los coptos. “Cuántos mártires en esta tierra, desde los primeros siglos del Cristianismo, han vivido la fe de manera heroica y hasta el final, prefiriendo derramar su sangre antes que renegar del Señor y ceder a las lisonjas del mal o a la tentación de responder al mal con el mal”.
Los coptos son una minoría, alrededor del 10 por ciento de la población de Egipto aunque es la minoría cristiana más numerosa de Oriente Próximo y también una de las más antiguas.
El mes pasado, después de los dos atentados, el Gobierno declaró el estado de emergencia.