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El Chicle, a sus padres: “Estad tranquilos, que en siete años estoy fuera”

El Chicle ha confesado que Rosario estaba con él en el momento del asesinato de Diana.

Enrique Abuín Grey, más conocido como El Chicle, escribió una carta a sus padres el pasado 14 de febrero. El asesino confeso de Diana Quer reconocía de nuevo la autoría del crimen, pero con un dato añadido: Rosario Rodríguez, su exmujer, habría estado en el momento en el que acabó con la vida de la joven madrileña en agosto de 2016. En estos momentos, la mujer está a la espera de la decisión del juez para saber si será imputada o absuelta.

La carta, en gallego, es un intento de tranquilizar a unos padres anonadados por las noticias de los últimos meses. Ellos mismos fueron los que entregaron la carta al juez de Instrucción nº2 de Ribeira, ante la existencia de datos que podrían ayudar a la investigación. “Vosotros tranquilos aquí. Ya me dijo la abogada que me iban a pedir homicidio, son de 10 a 15 años, pero a los 7 estaría fuera“. Esas eran las palabras de un seguro Abuín que, aunque sabe que será condenado, pretende estar menos tiempo en prisión de lo esperado. De la madre de su hija dice que le advirtió esa misma noche que su relación “se acabó”. “Entendedme que no quiero que Rosario pase por esto. Por eso dije que fui yo solo y a ella le dije que dijera que no venía conmigo. Dejad todo así. No le digáis nada”, rogaba el detenido para defender a su expareja. No obstante, su postura con respecto a Rosario es ambigua: a veces parece que la quiere defender, mientras que otras ocasiones amenaza con inculparla. Todo muy contradictorio. “Bueno, ya le conté todo a la abogada pero solo voy a decir la verdad después de hablar con Rosario”, concluía.

Aclara además que quiere ganar dinero con sus confesiones, y anuncia que está en contacto con un periodista que le podría dar una gran cantidad de dinero.

El Chicle está detenido desde el pasado 29 de diciembre, día en el que confesó el asesinato de Diana Quer y dónde se encontraba el cuerpo, en un pozo de una fábrica abandonada de Rianxo, a escasos metros del domicilio de sus padres. Está a la espera de ser juzgado.

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