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La marcha en memoria de ‘La Desbandá’ de 1.937 llega a Almería

Se cumplen 81 años de la masacre contra civiles que huían de Málaga a Almería por la carretera de la costa

Pese a que el PP se negó a debatir la moción de homenaje a las víctimas del genocidio de la carretera Málaga – Almería y apoyo a los actos previstos a la llegada de los senderistas, los grupos municipales de IU y PSOE en El Ejido se volcaron para mostrar su respeto y colaboración que esta etapa, pasada y presente, se merecen, recordando las miles de víctimas, en su mayoría civiles, masacrados por las tropas franquistas mientras huían de Málaga, que acababa de ser tomada por los nacionalistas, a pie hacia Almería, provincia todavía en poder de la República, el 8 de febrero de 1937, por la carretera de la costa.

Según publicó el Diario ‘Málaga hoy’ acaba “la II Marcha Senderista La Desbandá en recuerdo y homenaje a todas las personas que huyeron el 7 de febrero de 1937 por la carretera de Málaga hacia Almería, un éxodo que se cobró miles de víctimas. Han pasado ya 81 años desde la mayor masacre que ha conocido Málaga en tiempos modernos, cuando hasta 300 personas según algunas investigaciones se lanzaron con lo puesto a la carretera (conocida desde entonces como la ‘carretera de la muerte’) para huir de una muerte que presuponían segura. Fueron 250 kilómetros de terror que ahora se recuerdan en busca de la verdad, justicia y reparación de daños a las personas que consiguieron sobrevivir y a las familias de las víctimas”.

La jornada de conmemoración en El Ejido comenzó con la recepción en Balerma de los senderistas por parte de los concejales Juan Antonio López Escobar y Ángeles Fernández Guardia, de Izquierda Unida, y José Miguel Alarcón Morales, Ángeles Carvajal Martínez y M.ª del Mar Suero Ortega, del PSOE, quienes no dudaron en calzarse las zapatillas deportivas y recorrer los casi 16 kilómetros de trayecto hasta Almerimar, con una parada en los restos de los búnkeres de la Guerra Civil emplazados todavía en la falda del Castillo de Guardias Viejas.

Ya por la tarde visitaron las fotografías que hizo durante la tragedia el médico voluntario canadiense Norman Bethune, expuestas en el Hall del Teatro Auditorio ejidense, y a las 19 horas comenzó el que iba a ser el último acto en relación a La Desbandá en el término municipal de El Ejido, que se dividió en dos momentos. El primero fue el emotivo agradecimiento de Rafael Morales, presidente del Club Senderista “La Desbandá”, a las corporaciones municipales de IU y PSOE para que su paso por nuestro pueblo se pudiera calificar de éxito tanto en participación como en organización, “y la entrega de una placa conmemorativa para que no se olvide que por nuestra localidad transcurrió la triste marcha de los huidos del terror fascista y el horrible crimen que se cometió con ellos en el pasado, siendo masacrados y aterrorizados, y en el presente, con el olvido que ciertos organismos se empeñan en mantener”, recuerda Izquierda Unida.

Juan Antonio López Escobar y José Miguel Alarcón recogieron la placa y se comprometieron en luchar para que esté en un lugar digno y visible. La segunda parte se centró en la conferencia “La Desbandá de Málaga y sus repercusiones en la provincia de Almería” por Rafael Quirosa-Cheyrouze, catedrático del departamento de Historia Contemporánea de la Universidad de Almería quien, en una clara posición favorable a la recuperación de la memoria histórica declaró que “al igual no que no se le puede pedir a un médico que deje de curar o a un agricultor que deje de sembrar, no se le puede pedir a un historiador que deje de investigar, por mucho que no nos guste una etapa histórica”. De igual modo, los concejales López Escobar de IU y Alarcón Morales del PSOE El Ejido, que acompañaron al conferenciante en la mesa, remarcaron su compromiso con la Memoria Histórica y Democrática. La marcha continuaba el día 16 por la localidad de Roquetas de Mar y finaliza el sábado día 17 en Almería con su última etapa y actos de cierre.

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