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El Gobierno descarta permitir un nuevo confinamiento domiciliario a las comunidades

La vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, en un encuentro en el Palacio de La Moncloa | MONCLOA

El Gobierno no está por la labor de aplicar un nuevo confinamiento domiciliario para doblegar de golpe la curva de contagios de la tercera ola con motivo del coronavirus. La vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, ha asegurad con una entrevista al diario El País que el Ejecutivo no tiene prevista "esta posibilidad" porque la situación es irregular en función del territorio de estudio. "Afortunadamente, tenemos una estructura territorial del Estado y con los datos que tenemos en este momento haciendo unos ajustes que están llevando a cabo algunas comunidades autónomas podemos ir caminando en estas semanas", celebra la "número dos" del Gobierno.

La semana pasada, el Ministerio de Sanidad negó a Castilla y León la posibilidad de aplicar un nuevo confinamiento de los ciudadanos en sus casas para reducir los contagios en la comunidad autónoma. Por ende, el ministerio sigue la estela que mantuvo durante la segunda ola, cuando rechazó un encierro ciudadanos a Asturias cuando pasó unos días de verdadero descontrol del Covid-19 en ese territorio. 

La Comunidad Valenciana ha tenido que desmentir un bulo que ha corrido por la red social WhatsApp en el que se aseguraba que la consejera de Justicia, Interior y Administración Pública de la autonomía, Gabriela Bravo, comparecería este lunes para anunciar un confinamiento severo. Desde el gobierno de Ximo Puig lo rechazan "por el momento", aunque no descartan tomar "cuantas medidas sean necesarias para controlara la pandemia". 

¿Se puede declarar un nuevo confinamiento domiciliario en España?

La respuesta es no. Con el real decreto aprobado el pasado 25 de octubre, en el que se declara un nuevo estado de alarma hasta el 9 de mayo, no se permite declarar un nuevo confinamiento domiciliario en toda España o en una parte del país. Esta segunda situación excepcional actúa como un paraguas legal para que los gobiernos autonómicos tomen cuantas medidas sean necesarias a la hora de controlar la expansión del coronavirus a excepción de un nuevo confinamiento.

Para decretarlo, habría dos opciones: o que el Gobierno apruebe un nuevo estado de alarma, el tercero, para que fuera Moncloa quien permitiera un encierro domiciliario en todo el país o en una parte del mismo o aprobar un nuevo real decreto para que fueran las comunidades, en su papel de autoridades delegadas del nuevo estado de alarma, quienes tomaran la decisión de si aplicarlo o no.

Con este decreto de alarma, los gobiernos autonómicos pueden modular el toque de queda entre las 23.00 y las 06.00 horas (con una hora de margen de restricción), establecer cierres perimetrales o decretar el cierre de estableccimientos no esenciales y retocar sus horarios.

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