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El PSOE ganaría las elecciones con un 28,7% de los votos

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante la sesión de control al Ejecutivo.

La "nueva normalidad" de España tras la crisis sanitaria del coronavirus reforzaría a los grandes partidos del espectro político nacional. Según la último barómetro de Celeste-Tel para eldiario.es, el PSOE ganaría las elecciones generales con un 28,7% de los votos (121 escaños), a más de cinco puntos del principal líder de la oposición. El PP reuniría un 24,4% del electorado, por delante de Vox y su 14,6% de los votos que le mantendría como tercer partido más votado. Unidas Podemos cedería bastante terreno y se situaría en cuarta posición con 11,9% de los votos y tendría 29 escaños. Ciudadanos no levantaría mucho el vuelo y reuniría el 5,3% del electorado, con siete escaños.

Entre los partidos minoritarios, ERC sería el partido más beneficiado. La formación de Oriol Junqueras tendría un 3,5% (13 escañoss), por delante de JxCAT y 2,2% (ocho escaños). El PNV tendría un 1,3% y seis escaños, por delante de Más País y su 1,4% (dos escaños). EH-Bildu reuniríra el 1,2% (cinco escaños), delante de Compromís y su 0,8% y un escaño. Coalición Canaria (0,6%), BNG (0,9%) y Na+ (0,4%) tendrían dos escaños cada uno, por delante del PRC (0,2%) y Teruel Existe (0,1%) y su único escaño cada uno. . 

Por lo tanto, la política de bloques cambiaría algo. El centro-izquierda (PSOE, Unidas Podemos y Más País) aglutinaría el 42% de los votos frente al 44,3% de los votos del centro-derecha (PP, Vox y Ciudadanos). Por lo tanto, la decisión volvería a estar en los partidos minoritarios para ensaalzar, de nuevo, a Pedro Sánchez en La Moncloa o formular nuevas alianzas. 

Evolución del voto

El PSOE se mantendría como primera fuerza política y Pedro Sánchez como claro ganador, electoral y moralmente, de los comicios. Los socialistas ganarían siete décimas y un escaño. El PP también tendría un resultado electoral mejor que en el pasado 10 de noviembre, ascendiendo 3,6 puntos y 12 escaños pero sin evitar que Vox siga siendo un partido fuerte en la derecha. Vox apenas perdería medio punto en intención de voto y cinco escaños, por lo que Abascal podría respirar tranquilo. Unidas Podemos tendría un punto menos en intención de voto y seis escaños desaparecían del grupo parlamentario, algo similar a Ciudadanos. El partido de Inés Arrimadas no lograría frenar la hemorragia electoral y perdería punto y medio y tres escaños. 

Estos resultados, si bien pueden cambiar mucho hasta que se celebren unas elecciones, deberían servir como orientación para los partidos de cara a su estrategia de cara al nuevo curso político. 

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