Felipe VI ha decidido renunciar a la herencia de su padre “que personalmente le pudiera corresponder”, según ha anunciado este domingo la Casa Real. En un comunicado, Zarzuela también avanza que Juan Carlos I dejará de percibir la asignación que tiene fijada en los Presupuestos de la Casa del Rey.
“En coherencia con las palabras pronunciadas en su discurso de proclamación y con la finalidad de preservar la ejemplaridad de la Corona, Su Majestad quiere que sea conocido públicamente que don Juan Carlos tiene conocimiento de su decisión de renunciar a la herencia que personalmente le pudiera corresponder, así como a cualquier activo, inversión o estructura financiera cuyo origen, características o finalidad puedan no estar en consonancia con la legalidad o con los criterios de rectitud e integridad que rigen su actividad institucional y privada”, dice la nota oficial.
La Casa Real asegura que el Rey emérito dejará de percibir la asignación presupuestaria que se le otorgaba anualmente en virtud de su condición. En los últimos ejercicios llegaba a los 194.232 euros anuales.
El presunto escándalo de los pagos de Arabia Saudí
Esta decisión se produce después de que la Fiscalía Anticorrupción haya iniciado una investigación por los presuntos 100 millones de euros que Juan Carlos I habría recibido en una cuenta suiza procedentes de la monarquía de Arabia Saudí.
Además, este sábado, el diario británico The Telegraph publicaba que el actual monarca español “era beneficiario de las fundaciones presuntamente creadas por su padre para administrar ese dinero”. El Rey de España se desmarca de esas informaciones en el comunicado: “En relación con las noticias aparecidas sobre las entidades denominadas Fundación Zagatka y Fundación Lucum, Su Majestad desconoce por completo y a día de hoy su supuesta designación como beneficiario”.
Felipe VI supo hace un año de su supuesta designación como beneficiario
No obstante, en el caso de la existencia de Lucum, Zarzuela dice que el Jefe del Estado “tuvo conocimiento de ella por un despacho de abogados en marzo de 2019 y que en abril compareció ante notario para manifestar que había dirigido una carta a su padre para que si fuera cierta su designación o la de la Princesa de Asturias como beneficiarios, se dejara sin efecto, manifestando igualmente que no aceptaría participación o beneficio alguno en esa entidad”.
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El texto, colgado en la página web de la Casa Real, afirma también que don Juan Carlos ha pedido “que se haga público que en ningún momento facilitó información a su hijo de las dos fundaciones anteriormente citadas”, y que ha designado para su representación al abogado Javier Sánchez-Junco Mans. Será este letrado el que, a partir de ahora y “en ejercicio del derecho a la defensa”, proceda a dar cuenta públicamente de las informaciones que puedan afectar al monarca emérito.