El presidente del PP, Pablo Casado, volvió a usar ayer el artículo 155 como moneda de cambio para el electorado que opte por su partido en las elecciones generales del próximo 28 de abril. El dirigente popular aseguró que en el primer Consejo de Ministros que celebrara tras alzarse con la Presidencia del Gobierno aprobaría la reaplicación de dicho artículo de la Constitución.
Casado tendría en mente apoyarse en Ciudadanos y Vox, sus posibles socios de Gobierno si salieran las cuentas, para hacer realidad una de las peticiones más repetidas en la bancada azul al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Por lo tanto, Casado estaría dispuesto a prescindir del PSOE si sus votos no fueran estrictamente necesarios.
Pero para ello no solo se necesita la voluntad del presidente del PP. Una de las grandes preocupaciones en Génova 13 es perder la mayoría absoluta con la que cuentan en el Senado. El artículo 155 de la Constitución requiere que este se aplique con la mayoría absoluta de la Cámara Alta, por lo que Casado tendría que convencer a Albert Rivera y Santiago Abascal para que sus formaciones se sumen a la causa. El PSOE sería el partido más reticente, pues en los casi nueve meses de gobierno de Sánchez no han querido aplicarlo. Por lo tanto, Casado tendría difícil llevar a cabo una de sus medidas estrella de la campaña electoral.