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Los jóvenes en España, frustrados y en una precariedad crónica

Los jóvenes en España, frustrados y en una precariedad crónica.

Ayer martes conocíamos la última encuesta de población activa, y uno de los datos más sangrantes que arrojaba sobre la situación económica y social en España, era la cifra de desempleo juvenil, que si bien es cierto se ha reducido en los últimos años, todavía se sitúa por encima de un insoportable 30%. Es decir 1 de cada 3 jóvenes quiere trabajar y no puede.

PRECARIEDAD CRÓNICA DE LOS JÓVENES

Todo este contexto de degradación del colectivo de jóvenes en España, se explica en parte por el marco general iniciado en 2010, tras la brutal aplicación de las políticas de austeridad, que fomenta el modelo económico neoliberal, iniciadas por el gobierno del PSOE, y desde 2011 profundizadas por los gobiernos del PP

Desde ese momento se inicia un proceso de paro, precariedad y de expulsión de los jóvenes a otros países, y que desgraciadamente todavía continúa en nuestros días, a pesar de que nos hablen que ya hemos salido de la crisis y que estamos en recuperación económica.

Este empobrecimiento sistemático producido en los jóvenes, genera frustración y destrucción de las expectativas de la generación mejor preparada en la historia de nuestro país. Ya que se hace imposible al no tener trabajo, o tenerlo muy precario poder emprender un proyecto de vida, e independizarse a través del acceso a una vivienda.

SI EN ESPAÑA NO SE APUESTA POR LOS JÓVENES, EL PROYECTO COMÚN DE PAÍS ESTÁ MUERTO

Ante esta coyuntura general de paro y precariedad en los jóvenes, se hace muy difícil que el proyecto común de país, pueda tener viabilidad ya que si no hay jóvenes que trabajen no se van a pagar las pensiones, y si estos jóvenes no pueden formar una familia, el sistema público de pensiones no tendrá ningún recorrido, y por tanto no se producirá el necesario relevo generacional.

NINGUNO DE LOS PARTIDOS POLÍTICOS ACTUALES TIENE COMO EJE FUNDAMENTAL DE SU POLÍTICA, A LOS JÓVENES

Si nos ponemos a analizar ninguna formación política actual tiene en su eje programático la apuesta por el segmento joven, para que este país pueda tener viabilidad y salir adelante. Lo que ha habido en estos años es un blindaje a través de distintas políticas del segmento de mayores, olvidándose por completo del eje que conecta todo el sistema de país, que es el dar oportunidades y en condiciones dignas al colectivo joven. 

Ya que éstos son los que van a marcar el presente y el futuro de un país. A través de la natalidad, la creación de empresas, la innovación, el consumo y en definitiva de la mejora continua de la sociedad.

Se hace por tanto urgente que el eje de las políticas cambie de forma radical y los jóvenes empiecen a recuperar su identidad, a través de empleo de calidad que propicie la prosperidad presente y futura de este país.

 

 

 

 

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