El pastor que mató a la zamorana Leticia Rosino, de 33 años, el pasado 3 de mayo en Castrogonzalo, ha sido puesto a disposición de la Instancia e Instrucción número 1 de Benavente. Según fuentes policiales, J.A.A.C. no tiene antecedentes penales relacionados con violaciones ni violencia de género.
El hijo del detenido confesó esta mañana que su padre había matado a Leticia. Según su testimonio, el hombre intentó violar a la mujer y, cuando ella se resistió, la mató a pedradas. Después, dejó su cuerpo en un terraplén. El cadáver presentaba, obviamente, signos de violencia. La Guardia Civil sospechó desde el primer momento de él, un sexagenario perteneciente a una familia conflictiva del pueblo y muy frecuente en la zona del asesinato.
Durante la tarde de ayer la Guardia Civil, acompañada del pastor, su hijo, la juez del caso y la Fiscalía, visitaron la zona del delito en un intento de que confesara. Todo fue en vano.