“La Manada” tendrá que enfrentarse a otro juicio, acusados de agredir sexualmente a una joven de Pozoblanco, en Córdoba, dos meses antes que el abuso sexual que llevaron a cabo el 7 de julio de 2016 en sanfermines. Según el testimonio de la denunciante, conoció a cuatro de los cinco miembros de “La Manada” y, tras una noche de la que apenas tiene recuerdos, amaneció desnuda en su vehículo, con varios moretones en sus piernas. Sospechó que habían abusado de ella pero, al no tener pruebas, no denunció. Su propio entorno no le creyó cuando relató lo que pensaba que había sucedido.
No fue hasta que se hizo público el caso de San Fermín y al ver quiénes eran los supuestos agresores cuando se decidió a confesar qué le había pasado a ella. Tras las pesquisas recogidas, vieron que en el móvil de los acusados había dos vídeos que habían mandado por un grupo de WhatsApp en los que se puede ver cómo abusan sexualmente de ella. La chica, mientras tanto, está inconsciente. El juez determinó que la drogaron con alguna sustancia, posiblemente burundanga, para violarla minutos después. La joven, en aquel momento, tenía 21 años.
En el video, se puede ver cómo uno de los individuos besa a la chica mientras que otro le toca un pecho.
Comentarios indescriptibles.
En el grupo de WhatsApp, los miembros de “La Manada” intercambiaron comentarios completamente fuera de lugar tras pasar los vídeos donde se puede ver explícitamente cómo los hombres abusan sexualmente de la joven. “Madre mía, qué le echasteis a la chavala, burundanga. Qué bueno” o “Está muerta o qué?” son algunos de los mensajes vertidos en el grupo. Mensajes que les inculpan directamente en la agresión, por el que se les solicita otros 21 años de prisión por presunta violación.