El pasado domingo 1 de abril, alrededor de las 23:15 horas, un vecino alertó a los miembros de la asociación de que veía llamas en la parcela. El fuego arrasó la caseta central del recinto, donde guardaban los enseres de uso diario.
Las causas aún se están investigando, pero no se descarta que haya podido ser por un cortocircuito, o incluso la idea de que haya sido provocado sigue siendo una opción.
En declaraciones a Madridiario, Dilfenio Romero, presidente de La Casa Museo de Burrolandia, afirmó que los animales todavía se sienten raros dado que estuvieron dos días sin comer. Durante la entrevista el responsable de la asociación repitió reiteradamente “menos mal que los animales están a salvo”.
Al parecer, tanto los burros como el resto de animales (caballos, mulas, cabras y gallinas) no han resultado heridos dado que se encontraban en otro lugar del recinto.
Desde su página web, los miembros de la protectora han agradecido todo el apoyo y ánimo que están recibiendo, y aprovechan para pedir ayuda, tanto económica, como en forma de materiales: carretillas, remolques, herramientas, barnices para el mantenimiento de los boxes, pintura para el mantenimiento de las charcas de los patos y tortugas, brochas, rodillos, todo tipo de menaje de cocina y electrodomésticos.
Burrolandia es una protectora sin ánimo de lucro, que se dedica al estudio y a la preservación del burro. Tienen como objetivo dar a conocer al burro, el cual es un animal muy ligado a nuestro país, y su prioridad es el rescate, la recuperación, la conservación y el mantenimiento de la especie, así como las actividades culturales, educativas y de ocio.
Cada domingo de 10 a 14.30h La Casa Museo de Burrolandia (Tres Cantos) abre sus puertas gratuitamente para quienes quieran conocer un poquito más a este animal y su historia.