Las nuevas tecnologías y la expansión de internet han provocado que nuestros horarios y formas de trabajo sean cada vez más flexibles y permitan crear nuevos entornos laborales. Es más: podemos trabajar ya no solo fuera de casa, sino de nuestra región e incluso nuestro país de origen.
Los nómadas digitales son esos trabajadores que necesitan de Internet para desempeñar su oficio y vender o comercializar su potencial y su trabajo a empresas u otros trabajadores. Es decir: trabaja de forma remota y esto les permite moverse por distintos lugares para hacer un mejor uso de su trabajo.
Sin embargo, no todo es tan fácil: al igual que en España, generamos y producimos dinero y también tenemos que pagar una serie de impuestos por el lugar en el que estamos trabajando y viviendo. Mucha gente de a pie no conoce cómo gestionar todos estos trámites, por lo que es necesario que, si eres un nómada digital, tengas a un asesor fiscal emprendedores.
¿Tributo donde vivo o donde trabajo?
Al estar en constante movimiento, puede surgir una pregunta: ¿dónde pago mis impuestos? Como este término de “nómada digital” no está regulado por la legislación de la mayoría de países, surge una dicotomía a veces difícil de dirimir. Todos somos residentes fiscales de algún lugar, por lo que siempre tendremos que pagar en un país u otro.
Para determinar cuál es tu residencia fiscal, hay tres ítems: vivir en un país más de 183 días (a veces, es difícil de determinar, por lo que es un factor algo inestable), tener en ese territorio tu foco económico (es decir, que se estudia el lugar en el que generas más dinero, aunque es un punto conflictivo y polémico) y que tu pareja y descendientes menores de edad vivan en ese país.
¿Cómo regulo dónde tengo mi residencia fiscal?
A veces, llevar a cabo todos estos papeleos puede resultar difícil. Si quieres, puedes consultar un blog fiscalidad online, pero aquí te decimos en pocas palabras los pasos que tienes que seguir.
Tienes que comunicar a la Agencia Tributaria que has cambiado de lugar de residencia a través del modelo 030, un paso imprescindible para regularizar tu situación. Si no tienes un paradero determinado, tendrás que hacerlo cuando lo decidas, pero hay muchos ciudadanos que se van fuera del país con un rumbo fijo. Pero esto no es todo: deberás aportar el certificado de residencia del lugar en el que te encuentres para corroborar que la documentación que has presentado es fehaciente y veraz. Solo así podrás aportar el dinero que te exijan en cada país en función de lo que generes y consumas de la sociedad en la que te encuentras inmerso para mantener el sistema del país en el que resides.
Es fundamental concienciar a la población acerca de un buen comportamiento con nuestros conciudadanos y con la sociedad en general. Crear conciencia acerca del pago de impuestos y de tener una correcta conducta fiscal es fundamental para seguir gozando de ciertos derechos y ventajas con las que contamos por estar en países democráticos. ¿Quieres seguir disfrutando de ellos? Tendrás que seguir pagando si no quieres verte privado de ellos y, lo más importante, si no quieres tener problemas con la Justicia.