columnacero.com

El Arriaga de Bilbao ofrece “Black Marrow” con la Iceland Dance Company

Iceland Dance Company

Los amantes de la danza en Bilbao quizás recuerden a la coreógrafa islandesa Erna Ómarsdottir, puesto que ofreció una pequeña muestra junto a la explanada del Guggenheim hace más de 10 años. Es colaboradora de artistas como Bjork o Jan Fabre.

Black Marrow es una pieza repleta de movimientos originales, cuenta con una inquietante música de Ben Frost, obtuvo el Premio a la Mejor Música Original en los Premios de Artes Escénicas Islandesas 2015, y los bailarines se mueven juntos, se retuercen y pueden adoptar la forma de fósiles, máquinas o dioses paganos para dar forma a esta composición de baile que retrata un mundo en el que los instintos han sido industrializados.

El espectáculo contiene imágenes para evocar asociaciones con el cambio climático, con desastres ecológicos o con el modo de vida hedonista de hoy en día, pero desde una perspectiva poética. Black Marrow actúa como un espejo deformado, un reflejo sombreado de nuestra relación contemporánea con el planeta.

Resumen de Black Marrow

¿Bálsamo de Dios o excremento del Diablo? ¿Qué es esta sangre negra que bombea el pensamiento en las venas de nuestro mundo industrializado? ¿Qué mitología lo habita? ¿Cuánto nos metamorfoseará irreversiblemente a nosotros y nuestra relación con nuestro entorno? ¿Cuán adictos somos?¿Hasta dónde vamos a ir para satisfacer nuestras necesidades? ¿Somos el aceite del futuro?

Erna Ómarsdottir y Damien Jalet comenzaron con estas preguntas cuando crearon la primera versión de Black Marrow en Australia en 2009. De un tiempo a esta parte han desarrollado y evolucionado la pieza con los bailarines de la Iceland Dance Company hasta convertirla en un ritual de baile.

Exit mobile version