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Continúan los robos en portales y en contadores en Vicálvaro

Roban en varios cuartos de contadores en la calle Villablanca, en Vicálvaro

La oleada de robos que está teniendo lugar en portales y cuartos de contadores de Vicálvaro tiene un nuevo capítulo. En esta ocasión, los objetivos de los ladrones se han focalizado en la calle Villablanca, una de las calles principales del barrio madrileño. El modus operandi ha sido el mismo que en anteriores robos en otros bloques de viviendas.

En el número 71 de la calle Villablanca, en la noche del sábado al domingo, los vecinos se encontraron con el cuarto de contadores desvalijado. Se encontraron con que habían robado la cerradura del mencionado recinto sin que nadie viera nada ni se escuchara ningún ruido. "Al bajar al perro sobre las 9 de mañana vi la puerta abierta y fue cuando me di cuenta que no estaba la cerradura ni el cerrojo de dentro", asegura una de las vecinas afectadas.

Los ladrones solo se habrían llevado la cerradura, pero tuvieron que comprar inmediatamente un nuevo cerrojo para proteger el cuarto de contadores de nuevos intentos de robo: "Nos daba miedo de que alguien tocara algo".

Pero no ha sido el único robo que ha sucedido en la calle Villablanca. En el número 77, no solo se llevaron la cerradura del cuarto de contadores, sino que arrancaron la propia puerta de cuajo.Y del mismo modo, nadie vio ni oyó nada al haber ocurrido de madrugada.

Las sustracciones de cerraduras y puertas de contadores se unen a la oleada de robos que están teniendo lugar en Vicálvaro. La semana pasada, en el número 41 de la Calle del Gallo se toparon con que la puerta del cuarto de contadores había desaparecido y estos habían sido manipulados. En este caso, los hechos habrían sido a plena luz del día, cuando los vecinos se encontraban fuera de las viviendas.

También en el portal de la calle Helena de Troya 8 sustrajeron la cerradura desde dentro durante dos noches seguidas, tras haber sido repuesta por los vecinos. Al denunciar los hechos a la Policía Nacional, las autoridades se limitaron a contestar que denunciaran sin personarse en el piso, según los vecinos. Por tanto, es una página más de una oleada que tiene como escenario el barrio de Vicálvaro

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