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Comer bien mientras se envejece protege la salud

La alimentación de la tercera edad requiere más cuidados, para ayudar a prevenir la aparición de enfermedades comunes durante esta etapa de la vida.

La alimentación saludable es importante a cualquier edad, pero lo es aún más a medida que se llega a la ancianidad. Cuando las personas envejecen, comer una dieta saludable puede ayudar a mejorar la agudeza mental, aumentar los niveles de energía y la resistencia a las enfermedades.

Investigaciones sobre nutrición, demuestran que comer bien, también puede ser la clave para una actitud positiva y mantenerse emocionalmente equilibrado. Pero una alimentación saludable no tiene que ver con la dieta y el sacrificio. Más bien, debe tratarse de disfrutar de comida fresca y sabrosa, ingredientes saludables y comer en compañía de amigos y familiares.

No importa la edad o sus hábitos alimenticios anteriores, nunca es demasiado tarde para cambiar la dieta y mejorar su forma de pensar y sentirse. Mejorar los menús ayuda a la gente a vivir más sano y fuerte. Una buena nutrición puede aumentar la inmunidad, combatir las toxinas que causan enfermedades, controlar el peso y reducir el riesgo de enfermedades cardíacas, derrames cerebrales, presión arterial alta, diabetes tipo 2, pérdida ósea y cáncer.

Los médicos geriatras señalan que, junto con la actividad física, una dieta equilibrada también puede contribuir a una mayor independencia, a medida que se envejece y agudizar la mente. Las personas que comen frutas, verduras de hoja verde, pescado y nueces con ácidos grasos omega-3 pueden mejorar la concentración y disminuir el riesgo de la enfermedad de Alzheimer.

Por ejemplo, el té verde, rico en antioxidantes, también puede mejorar la memoria y el estado de alerta mental, a medida que llega a la tercera edad y ayuda a sentirse mejor. Las comidas saludables pueden darle más energía y a contribuir también a verse mejor, lo que aumenta el estado de ánimo y la autoestima. Todo está conectado: cuando el cuerpo se siente bien, las personas se sienten más feliz, por dentro y por fuera.

Una alimentación saludable es más que solo comida

Comer bien a medida que envejece tiene relación con la calidad y variedad de los alimentos que se consumen. También se trata del placer de comer, que aumenta cuando se comparte una comida. Comer con otras personas puede ser tan importante, como agregar vitaminas a su dieta. Un ambiente social estimula la mente, hace que las comidas sean más agradables y puede ayudar a cumplir con un plan de alimentación saludable. Incluso si la persona vive sola, puede hacer que las comidas saludables sean más placenteras al ir compras con otros. Comprar con un amigo, puede darte a las personas mayores la oportunidad de ponerte al día en los mejores alimentos, sin quedarte atrás en aspectos como la nutrición de moda. También es una excelente manera de compartir nuevas ideas de comidas y ahorrar dinero en ofertas de descuento como "compre una, obtenga el precio de la segunda mitad", entre otras.

Cocinar con otros

Invitar a un amigo a compartir las responsabilidades de cocinar: uno prepara el plato principal, el otro postre, por ejemplo. Cocinar con otros puede ser una forma divertida de profundizar sus relaciones y dividir los costos, puede hacer que sea más barato para ambos.

Hacer de las comidas una experiencia social

El simple acto de hablar con un amigo o ser querido sobre la mesa, puede desempeñar un papel importante para aliviar el estrés y aumentar el estado de ánimo. Es recomendable reunir a la familia regularmente y mantenerse al día sobre la vida de todos. Invitar a un amigo, compañero de trabajo o vecino a comer es de mucha utilidad para mejorar aspectos como la socialización.

Otra sugerencia para las personas mayores es animarse a visitar un hogar para adultos mayores o inscribirse en un programa de comidas para la tercera edad, lo cual  también puede proporcionar comidas acompañadas y nutritivas para quienes están llegando a la etapa de la vida.

La alimentación saludable es importante a cualquier edad, pero lo es aún más a medida que se llega a la ancianidad. Cuando las personas envejecen, comer una dieta saludable puede ayudar a mejorar la agudeza mental, aumentar los niveles de energía y la resistencia a las enfermedades.

                      

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