La Generalitat de Catalunya y el Ayuntamiento de Barcelona coincidieron ayer en destacar lo importante que es desarrollar el autoconsumo por ser un elemento clave en el cambio del paradigma energético. Así lo afirmó Assumpta Ferran, directora del Instituto Catalán de Energía (ICAEN), en el marco de la jornada “Fotovoltaica y Autoconsumo: oportunidades y retos de la transición energética en Cataluña”.
La directora también destacó la responsabilidad que tienen todas las administraciones, tanto a nivel autonómico como a nivel local, de avanzar en la transición energética hacia un nuevo modelo basado en la generación distribuida que permita un sistema más democrático y social. Recordó también el impulso que desde el ICAEN se está dando a la creación de la Mesa de Autoconsumo. Este órgano, junto al plan de trabajo del Plan estratégico para el despliegue de infraestructura de recarga para el vehículo eléctrico en Catalunya 2016-2019 (PIRVEC, multiplica los esfuerzos y facilita esta transición. Sus ejes de desarrollo pasan por el uso de la tecnología fotovoltaica, el vehículo eléctrico y las baterías que, a su parecer, sitúan al ciudadano en el centro de la gestión de la energía.
Otro encargado de inaugurar la jornada fue el director general de la Unión Española Fotovoltaica (UNEF), José Donoso, que señaló que el autoconsumo es una cuestión de responsabilidad social en la lucha contra el cambio climático. Además, recordó que permite rebajar el precio de la energía eléctrica para todo el mundo, sin ser una amenaza para la sostenibilidad del sistema. Frente a estos beneficios, añadió “está claro que con el autoconsumo ganamos todos, no sólo los que apuestan por él, sino toda la sociedad, para que cada euro de ahorro que consigue una autoconsumidor, produce un ahorro de 5 euros a los consumidores generales”.
Por su lado, la representante del Ayuntamiento de Barcelona también reafirmó el compromiso del consistorio con el impulso de la generación de energía renovable y el autoconsumo en espacios públicos. Entre los objetivos que tienen marcados destacan el incremento de la generación eléctrica municipal procedentes de renovables y el aumento en un 10% en el caso de la generación eléctrica privada.
La jornada también hizo especial hincapié en el papel central que tiene el almacenaje en el cambio hacia un modelo descentralizado de producción de energía. Tanto en el vehículo eléctrico como en un dispositivo estacionario, este proporciona apoyo y estabilidad en la red, reduciendo costes y emisiones y permitiendo la integración entre la movilidad inteligente y los sistemas de consumo doméstico e industrial.
Futuro esperanzador
Los ponentes a la jornada coincidieron en señalar que el autoconsumo fotovoltaico, las ciudades inteligentes y la generación distribuida son los ejes del cambio de paradigma, que seguirá adelantando a pesar de las barreras y de las dificultades.
En este sentido, se transmitió un mensaje positivo basado en el futuro esperanzador que tiene por delante el sector. Y es que la tecnología fotovoltaica ha llegado a un nivel de alta competitividad, tenemos el recurso principal – el sol – y hay muchas opciones de financiación, incluidas las de financiación colectiva que hay disponibles en el mercado.