El ejecutivo presidido por Theresa May quiere que hoy los residentes europeos en Reino Unido pierdan sus derechos que tenían mientras los británicos eran un estado miembro. Así como poner fin al acuerdo de libre circulación. Por su parte, el Parlamento Europeo se opone y pide a los británicos que esos derechos deben estar vigentes durante los dos próximos años.
Según publica el diario The Guardian, el gobierno británico y la UE han mantenido diversas conversaciones el pasado lunes. De estas reuniones ha nacido una resolución de cinco páginas en las que se detallan las líneas rojas del Parlamento Europeo. Entre esas condiciones, los parlamentarios votarán en contra de cualquier resolución que degrade los derechos de los ciudadanos europeos residentes en las Islas Británicas.
El Reino Unido cree que hoy, fecha en la que anunciarán formalmente su salida de la Unión Europea, es la fecha en la que los ciudadanos europeos residentes en el Reino Unido tendrán derechos diferentes. La Unión Europea insiste en que no permitirá que se discrimine a los ciudadanos mientras el Reino Unido siga siendo miembro de la Unión.
Pitella, líder del bloque socialista en el parlamento, afirmó que: “Hemos oído que Theresa May está considerando la fecha de corte como fecha de notificación. Estamos totalmente en desacuerdo sobre esto y creemos que los ciudadanos británicos y los de los otros 27 estados son ciudadanos de la UE hasta el día del divorcio. Durante este período, el Reino Unido es un Estado miembro con plenos derechos y obligaciones. No puede ser justo que alguien que firme un contrato de trabajo en el Reino Unido el martes tenga más derechos que alguien que firme un contrato el jueves”.
Guy Verhofstadt, representante del Parlamento Europeo, comento: “Cualquier decisión unilateral de restringir los derechos de los ciudadanos de la UE en el Reino Unido, mientras que el Reino Unido sigue siendo miembro de la UE, sería contrario a la legislación de la UE y nos opondríamos a tal movimiento”.
Pittella agregó: “No permitiremos que Theresa May entregue un Brexit duro para los ciudadanos de la UE. Si no insistimos en los derechos de los trabajadores en el Reino Unido, me temo que el servicio de salud del Reino Unido se derrumbará, dado el número de ciudadanos de la UE que trabajan como enfermeras. Así que aquí hay un interés común “.
Además, la Unión Europea exigirá al Reino Unido el pago de los compromisos adquiridos hasta 2019, fecha en la que se hará efectivo el divorcio.
