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La diputada de JxCAT Laura Borràs podría disfrutar de sus últimos días de inmunidad como representante pública. La Comisión del Estatuto del Diputado del Congreso votó este jueves a favor de levantar su condición inmune gracias a los votos a favor del PSOE, PP, Vox y Ciudadanos, el "no" del PNV y de JxCAT y la abstención de Unidas Podemos. La votación se realizó a puerta cerrada. ERC y EH-Bildu no participaron en la votación.
La última palabra la tendrán los 350 diputados del Congreso. La semana que viene, uno de los plenos que se celebren -posiblemente el del jueves 25– en la Carrera de San Jerónimo decidirá qué ocurre con la inmunidad de la diputada independentista. La Comisión ya ha elevado al pleno la decisión y la votación se pdorucirá a puerta cerrada. Con toda seguridad, Borràs dejará de ser inmune porque la votación será igual que la del pasado jueves y, en el caso de que no fuera así, los cuatro partidos ya mencionados suman una más que amplia mayoría imposible de tumbar.
El Tribunal Supremo presentó un suplicatorio para que la Cámara decidiera si le retiraba la inmunidad a la parlamentaria. Borràs se enfrenta a presuntos delitos de fraude a la Administración, malversación de caudales públicos y falsedad documental en el tiempo que ocupó la dirección de la Institució de les Lletres Catalanes (ILC). Sin embargo, antes tendrá que perder la inmunidad para poder ser investigada por el Supremo.
Complicación electoral
El proceso judicial al que se enfrentará Borràs con toda seguridad ha truncado sus aspiraciones a ser la cabeza de lista de JxCAT en las elecciones autonómicas de Cataluña. Carles Puigdemont y el propio Quim Torra, que en los próximos meses podría ser inhabilitado completamente por desobediencia, han defendido que la diputada sería una excelente presidenta de la Generalitat, algo que ahora se torna complicado.
