Los Presupuestos Generales del Estado 2019 (PGE) están un paso más cerca de ser aprobados. Ciudadanos renunció ayer a estar junto al PP en el bloqueo de la Ley de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera para que el PSOE pueda sortear al partido de Pablo Casado en el Senado sobre la senda del déficit. El bloque de centro-derecha estaba alargando la aprobación de la misma mediante la petición de hasta tres prórrogas; el partido de Albert Rivera no pidió ayer otra más.
Esta decisión es una apuesta del partido naranja por marcas las distancias con Génova 13. Asegura que no apoyará los Presupuestos y se compromete a ponerle todas las trabas posibles, pero considera que no es viable bloquear el debate parlamentario. "Lo que no se puede es paralizar la actividad del Congreso porque no le gusta al PP. No nos gustan los Presupuestos de Sánchez e Iglesias, pero hemos venido a debatir, no a bloquear", apuntaron varias personas de la ejecutiva naranja. Desde el PP apuntan a una gran irresponsabilidad por parte de Rivera y su grupo por hacer un poco más viable "unos Presupuestos nefastos para España".
Por lo tanto, Sánchez ha dado un pequeño y muy importante paso. La senda del déficit es la antesala de los PGE, y ahora está a punto de aprobarse. El Gobierno y su principal socio, Unidos Podemos, quieren marcar una senda del déficit del 1,8%, cinco décimas mayor que la del gobierno de Rajoy. No obstante, esta no consiguió el apoyo parlamentario con el rechazo del PP y Ciudadanos y la abstención de Unidos Podemos, ERC, PDeCAT, ERC y Compromís. La Mesa del Congreso, la que podía bloquear dicha tramitación, activará la propuesta, ya que solo el PP se opone frente al PSOE, Unidos Podemos y Ciudadanos.