Mariano Rajoy quiere disfrutar de algunos de los privilegios que todavía posee como expresidente del Gobierno. Aunque recibió cantidad de halagos por renunciar al sueldo vitalicio del que disfrutan el resto de expresidentes del Ejecutivo y se reincorporó al trabajo en su plaza de registrador de la propiedad en Santa Pola, Rajoy ha solicitado su asignación anual para cubrir gastos de oficina, coche oficial y personal de seguridad.
Así lo ha confirmado el Ministerio de la Presidencia, señalando que "ningún expresidente ha renunciado a la dotación, D.Mariano Rajoy la ha pedido". El estado de la misma está "pendiente de tramitación". Por lo tanto, el expresidente contará con una oficina con dos puestos de trabajo, uno de nivel 30 y otro de 18, que serán ocupados por dos personas que él mismo elija. Además, se cubrirán los gastos de la misma. El coche oficial del que disfruta Rajoy también se incluye en esta asignación, aparte de poder disfrutar de "libre pase" de todos tipo de tranporte terrestre, aéreo o marítimo que regule el Estado.
El decreto de 1992 que regula el Estatuto de los expresidentes de Gobierno beneficia a Felipe González, José María Aznar y José Luis Rodríguez Zapatero. A todos ellos se les tratará como "presidentes", según dicta el escrito. En la actualidad, los tres exmandatarios disfrutan de una paga anual de unos 75 euros, cantidad que no percibe Rajoy al ser incompatible con su sueldo como registrador de la propiedad.
