El 22 de enero de 2017 quedó grabado a fuego en la cabeza de Ryan Mason. Tras un fuerte choque de cabezas con Gary Cahill el centrocampista inglés tuvo que ser hospitalizado por una fractura craneal. Ese mismo día comenzó su lucha por seguir jugando al fútbol de manera profesional.
Tras visitar a numerosos especialistas dentro del campo de la neurociencia el futbolista fue advertido de que no era recomendable su continuidad como futbolista debido a la debilitación de las zonas parietal y temporal derechas (desde la sien hasta detrás de la oreja).
El ex futbolista del Tottenham se aferró a cualquier oportunidad de seguir practicando de manera profesional el deporte rey, pero al final sus esfuerzos han sido en vano. “Anunciamos con profundo pesar que, debido a su lesión sufrida en la cabeza, Mason se retirará del fútbol con efecto inmediato“, han sido las palabras que el club ha emitido en un comunicado oficial.
Él mismo, mediante su cuenta de Instagram, ha dejado unas palabras a todos los aficionados: “He trabajado sin descanso para poder volver. Desafortunadamente, no tengo otra opción que retirarme debido a los riesgos que conlleva la naturaleza de mi lesión. Estaré eternamente agradecido a todo el mundo que me ha ayudado a recuperarme de esta lesión que puso mi vida en peligro”.
Futbolistas, equipos y combinados nacionales de todas partes del mundo se han solidarizado con el mediocentro inglés mediante mensajes en las redes sociales. El más emotivo se trata de un tweet del propio Cahill en el que dice sentirse “devastado por la noticia” y le desea “lo mejor para el futuro tanto a él como a su familia”.
Devastated to hear today’s news from Ryan. Competing for a corner is something we’ve done thousands of times and to see those consequences for a top professional like Ryan is heartbreaking. Sending all my love to him and his family, and wishing him the best for the future.
— Gary Cahill (@GaryJCahill) 13 de febrero de 2018
